- Durante una semana
- Medio millón de alumnos se desplazan a diario en bus escolar
- Comprobarán autorizaciones y documentos tanto del vehículo como del conductor, elementos de seguridad, tiempos de conducción y descanso, velocidad, alcohol/ drogas…
- Especial atención al uso del cinturón de seguridad en aquellos autocares que los lleven instalados, su uso evita 9 de cada 10 lesiones infantiles graves o mortales
El autobús escolar es el medio de transporte que utilizan a diario casi
medio millón de alumnos para acudir al colegio y regresar a casa.
Debido a que muchos de esos desplazamientos se realizan por carreteras
convencionales, donde el riesgo de accidentalidad es mayor, la Dirección
General de Tráfico pone en marcha una campaña de vigilancia sobre los
vehículos destinados a este tipo de transporte.
Aunque las
cifras de siniestralidad anuales reflejan que es un sector seguro, el
año pasado no se produjo ninguna víctima mortal entre los usuarios de
los autobuses escolares, Tráfico si quiere intensificar la vigilancia a
los cerca de 17.000 autobuses (alrededor de un 40% de toda la flota
privada) que realizan cada día este servicio para que siga siendo un
medio de transporte seguro.
Durante una semana –del 24 al 30 de
noviembre- los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil
incrementarán los controles que realizan a este tipo de transporte,
comprobando que las autorizaciones y documentos de dichos vehículos son
los correctos para la prestación del servicio; que los elementos de
seguridad y demás condiciones técnicas son los que exige la normativa,
así como los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor,
como el permiso de conducción o los tiempos de conducción y descanso.
Además, controlarán que los conductores circulan a la velocidad
permitida y que no hacen uso del teléfono móvil u otros aparatos que
supongan distracción ya que ambos factores, velocidad y distracción, son
las principales causas de los accidentes en los que están implicados
este tipo de vehículos. También incrementarán los controles de alcohol y
drogas entre los conductores.
El CINTURÓN DE SEGURIDAD ES VIDA
Durante esta campaña se prestará especial atención al uso del cinturón
de seguridad en aquellos autobuses escolares que lo tengan instalados,
actualmente ese porcentaje asciende a más del 60%.
Un menor sin
ningún tipo de retención multiplica por cinco las posibilidades de
sufrir lesiones mortales y nueve de cada diez lesiones infantiles graves
o mortales, podían haberse evitado si se hubiera utilizado este tipo de
dispositivo, por lo que su uso es esencial en cualquier trayecto, corto
o largo independientemente de la vía por la que circule.
Desde
octubre de 2007 se deniega la matriculación a cualquier autobús que no
lleve instalados estos sistemas de retención, ya que es obligatorio que
los equipen por fabricación.
Que no haya ningún menor fallecido
sin sistema de retención infantil es uno de los indicadores establecidos
en la Estrategia de Seguridad Vial 2011-2020 aprobada en febrero de
2011 por el Consejo de Ministros.
EDUCANDO EN EL BUS ESCOLAR
Los trayectos de casa al cole pueden ser buenos momentos para que el
adulto que acompaña a los menores les recuerde algunos mensajes sobre
seguridad vial, tales como:
- No pararse nunca detrás del autobús.
- Esperar la señal del conductor y cruzar siempre al menos tres metros por delante.
- Dentro del autobús, mantenerse sentado y con el cinturón puesto, si éste lo lleva instalado.
- No correr al llegar al autobús, ni al salir.
- Obedecer al conductor y al monitor.
Además los padres deben comprobar la seguridad de los autocares en los
que se desplazan sus hijos, solicitar al centro la contratación de
autocares con cinturones y comprobar que un monitor acompaña a los niños
durante el trayecto.
UNA ALTERNATIVA SALUDABLE PARA IR AL COLE
Otra de las apuestas de la DGT, en colaboración con la Federación de
Municipios y Provincias, es la de promover e incentivar los caminos esco
lares seguros que favorezcan y estimulen el desplazamiento a pie, en
bici o en transporte público en la ida y vuelta al colegio.
Para ello, dichos caminos deben reunir una serie de características entre las que destacan:
- Aceras amplias, con semáforos que duren lo suficiente para que les de tiempo a pasar.
- Semáforo sin luz ámbar.
- Parada donde los padres dejen a los niños y de ahí con un adulto, vayan andando al colegio.
- Colaboración de los comerciantes a los menores que van solos al colegio.
- Prohibición de aparcar a la entrada y salida del colegio, evitando aglomeraciones.
- Velocidad máxima de 30 km/h
- Parking para bicicletas.
- Policía para regular la entrada al colegio