Las consecuencias de la exposición prolongada al sol, las picaduras de medusas y las lesiones medulares asociadas a las zambullidas son algunos de los principales riesgos para la salud asociados a las vacaciones de verano. En el inicio del periodo estival en España, el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, recuerda, como cada año, una serie de recomendaciones para prevenir, en lo posible, efectos negativos sobre la salud.
No lanzarse al agua en zonas desconocidas, evitar el consumo de alcohol antes de bañarse, vigilar especialmente a los niños durante el baño, no exponerse al sol en las horas centrales del día, proteger especialmente la cabeza y los ojos, utilizar cremas protectoras y limpiar con agua salada las picaduras de medusas figuran entre los principales consejos que se ofrecen para este periodo estival.
No lanzarse al agua en zonas desconocidas, evitar el consumo de alcohol antes de bañarse, vigilar especialmente a los niños durante el baño, no exponerse al sol en las horas centrales del día, proteger especialmente la cabeza y los ojos, utilizar cremas protectoras y limpiar con agua salada las picaduras de medusas figuran entre los principales consejos que se ofrecen para este periodo estival.
- Recomendaciones generales de prevención y protección frente a temperaturas elevadas
- Protección frente a radiaciones solares
- Prevención de accidentes en el medio acuático
- Precaución ante las picaduras de medusas
Medidas generales de prevención y protección frente a temperaturas elevadas
Desde el Ministerio de Sanidad, Servicios
Sociales e Igualdad se quiere incidir en la necesidad de prevenir los
efectos que las altas temperaturas pueden tener sobre su salud.
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, desde el año 2004 cuenta con un Protocolo de actuaciones de los Servicios Sanitarios ante una Ola de Calor elaborado conjuntamente por este Departamento y Sociedades Científicas Españolas.
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ha elaborado un documento con Información sobre el buen uso de los medicamentos en caso de Ola de Calor.
El Sistema Nacional de Salud resulta clave en
el abordaje de los problemas derivados de la exposición a temperaturas
excesivas. Dado que la mejor defensa es la prevención se insiste en un decálogo "Disfruta este verano con salud" de recomendaciones generales:
- Beba agua y líquidos con frecuencia, aunque no sienta sed y con independencia de la actividad física que realice.
- No abuse de las bebidas con cafeína, alcohol o grandes cantidades de azúcar, ya que pueden hacer perder más líquido corporal.
- Aunque cualquier persona puede sufrir un problema relacionado con el calor, preste especial atención a bebes y niños pequeños, mayores y personas con enfermedades que puedan agravarse con el calor y la deshidratación, como las patologías cardiacas.
- Permanezca el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados, y refrésquese cada vez que lo necesite.
- Procure reducir la actividad física y evitar realizar deportes al aire libre en las horas más calurosas (de 12.00 a 17.00).
- Use ropa ligera, holgada y que deje transpirar.
- Nunca deje ninguna persona en un vehículo estacionado y cerrado (especialmente a niños, ancianos o enfermos crónicos).
- Consulte a su médico ante síntomas que se prolonguen más de una hora y que puedan estar relacionados con las altas temperaturas.
- Mantenga sus medicinas en un lugar fresco; el calor puede alterar su composición y sus efectos.
- Haga comidas ligeras que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor (ensaladas, frutas, verduras, zumos, etc.)
Durante el verano, es cuando más actividades
desarrollamos al aire libre pero también es la época en la que los rayos
del sol son más perjudiciales, ya que inciden en la Tierra de forma más
perpendicular. Nuestra piel es en esta época muy vulnerable a la
exposición solar, por lo que una adecuada protección es fundamental para
evitar daños sobre la salud, sobre todo porque los efectos negativos de la exposición prolongada al sol son acumulativos.
Algunas de estas consecuencias son
quemaduras, insolaciones, afecciones oculares, alteraciones del sistema
inmunitario o el envejecimiento cutáneo prematuro. El aumento del cáncer
de piel (carcinoma y melanoma maligno) en los últimos años es un claro
indicativo de los peligros que comportan estas radiaciones cuando no se
toman las debidas medidas de precaución.
No obstante, la mayoría de los efectos adversos de la exposición al sol son evitables
siguiendo unos sencillos consejos que recomiendan el Ministerio de
Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y las organizaciones
especializadas:
- Evite exponerse al sol en las horas centrales del día (de 12 a 17 horas), así como exposiciones prolongadas o siestas.
- Disminuya las partes del cuerpo expuestas directamente al sol. Las prendas ligeras, las camisas de punto tupido y los pantalones largos bloquearán la mayor parte de la radiación solar. Las prendas más cómodas en los climas calurosos son las camisas de algodón de colores claros. La ropa debe ser cómoda y no demasiado ceñida.
- Se recomienda cubrir la cabeza con sombreros o gorras.
- El sol puede dañar también los ojos, por lo que es recomendable utilizar gafas de sol homologadas que filtren, al menos, el 90% de la radiación ultravioleta(UV).
- Utilice productos de protección solar con un factor elevado y adecuados a su edad, tipo de piel y zona del cuerpo. Estos protectores deberán aplicarse, en cantidades generosas, 30 minutos antes de exponerse al sol y renovarse cada dos horas y después de cada baño. Recuerde que ni siquiera los productos de protección solar muy eficaces y que protegen frente a ambas radiaciones, UVB y UVA, pueden garantizar una protección total frente a los riesgos que la radiación ultravioleta entraña para la salud. La única forma de evitar completamente los daños del sol es evitar la exposición y, cuando esto no se haga, tomar las medidas de protección adecuadas descritas para intentar disminuir el riesgo.
- Sea cuidadoso en exposiciones sobre y en el agua, ya que la radiación puede penetrar hasta un metro en el agua clara.
- Proteja especialmente a los niños, ya que son muy sensibles a sobre exposiciones al sol en esta época del año. Se debe evitar también que menores de 3 años estén expuestos al sol. Se deben utilizar cremas de factor solar elevado (se aconsejan factores de protección solar mayores de 40).
- Si toma medicación, compruebe que ésta no aumenta la sensibilidad cutánea a la radiación ultravioleta.
- No olvide que el riesgo de quemaduras solares se incrementa con la altura (cada 300 metros, aumenta un 4% el poder de las radiaciones ultravioletas) por lo que en la montaña se deben seguir los mismos consejos para protegerse del sol.
Prevención de accidentes en el medio acuático
Con el comienzo del verano se inicia también
la temporada de playas, piscinas y otros entornos acuáticos como lagos y
ríos, donde muchas personas deciden disfrutar de su tiempo libre.
Las actividades acuáticas recreativas, como nadar, pescar, deportes
náuticos…etc. son muy beneficiosas para la salud de las personas de
todas las edades.
Sin embargo, sabemos que en estos lugares de
ocio y disfrute, también se producen lesiones que en algunos casos
pueden ser graves o incluso pueden llegar a producir la muerte. Estas
lesiones graves (ahogamientos, traumatismos craneales y lesiones
medulares) en su mayoría se producen por cometer imprudencias o en un
momento de descuido de la vigilancia de los menores, pero en su gran
mayoría se pueden evitar o minimizar sus consecuencias, adoptando una
conducta segura y siguiendo las recomendaciones de los expertos como son:
- Los adultos deben vigilar de forma constante y de cerca a los menores, tanto cuando están en el agua o se encuentran jugando cerca de ella.
- Utilizar un chaleco salvavidas si no se sabe nadar o aunque se sepa nadar cuando se practique un deporte náutica.
- Respetar el significado de las banderas y las indicaciones de los socorristas.
- No consumir alcohol cuando se vaya a realizar cualquier tipo de actividad en el agua.
- No bañarse de noche.
- Bañarse siempre acompañado.
- Conocer la profundidad y el fondo del agua antes de zambullirse.
- Evitar bucear o saltar en aguas turbias.
- Evitar bañarse en zonas de corrientes.
Estos y otros consejos están disponibles en :
- Folleto del MSSSI : Disfruta del agua y evita los riesgos. Guía para las familias
- Decálogo del nadador
- Guía de la Alianza Europea: Protección de los niños y jóvenes en las actividades acuáticas recreativas
Precaución ante picaduras de medusas
En los últimos años y en determinadas épocas,
en algunas costas de nuestro litoral se está produciendo la llegada de
numerosas poblaciones de medusas, que son arrastradas por las corrientes
marinas. Esto puede llegar a alterar o incluso impedir, en algunos
casos, los paseos o los baños en las playas afectadas.
Las medusas tienen unas células urticantes,
que contienen en su interior veneno; cuando lo liberan lo hacen para
defenderse de algún peligro o para capturar presas. Por norma general, la
mayoría de los incidentes ocurren por contacto accidental con las
medusas en el baño, al ser pisadas o al ser manipuladas, generalmente
por los niños.
Aunque siempre hay excepciones, las picaduras
de las medusas no suelen ser graves y generalmente se relaciona con la
especie. El contacto con medusas, vivas, muertas o con restos de ellas
se caracteriza por dolor y/o un picor intenso e inmediato en la zona
afectada, pudiendo aparecer reacciones locales con enrojecimiento,
inflamación y vesículas pequeñas entre otros, más rara es la
sintomatología general como náuseas, vómitos y calambres musculares. Los
casos más graves pueden presentar pérdida de conciencia con el
consecuente riesgo de ahogarse.
Las personas que hayan tenido contacto
previo, pueden estar sensibilizadas y una segunda picadura puede
producir una reacción más severa. Deberán tener especial cuidado las
personas con un historial de alergias así como las personas con
problemas cardíacos. Se debe extremar la vigilancia a los niños
pequeños.
Además de los bañistas de las playas, también
pueden verse afectados los submarinistas y los trabajadores del mar. Se
recomienda precaución, ya que el mayor riesgo es no tener conciencia
del peligro que puede suponer el contacto con las medusas.
Si ha sido picado o ha tocado una medusa conviene seguir los siguientes consejos:
- Hay que limpiar la zona afectada por la picadura.
- No frotar la zona afectada, ni con arena ni con la toalla ni con nada que pueda lesionar más.
- Usar siempre agua salada. No limpiar la zona afectada con agua dulce.
- Durante 15 minutos aplicar frío sobre la zona afectada usando una bolsa de plástico que contenga hielo. Nunca aplicar hielo directamente a no ser que sea de agua marina.
- Si hay algún resto de tentáculo adherido a la piel, no realizar movimientos bruscos para desprenderse de ellos, se deben quitar, pero nunca tocar la zona afectada con las manos. Se utilizarán pinzas.
- Si el dolor es muy intenso o el estado de la persona empeora progresivamente, deberá acudir de inmediato a un centro médico.
También se señalan una serie de consejos y recomendaciones útiles si hay un gran número de medusas en las zonas de baño:
- Tomar precauciones incluso si hay medusas en zonas alejadas de las zonas de baño, la acción de las olas rompe los tentáculos y los trozos flotantes de medusas están activos.
- No pasear por la playa en la zona donde rompen las olas y pueden abundar fragmentos de medusa.
- En los días que aparecen las medusas evitar los juegos en la orilla de la playa.
- Con precaución y sin tocarlas con los dedos sacarlas fuera del agua. Recoger con cuidado aquellas que se han quedado en el borde de la playa.
- Avisar a otros bañistas que no las toquen incluso si éstas parecen muertas o están fraccionadas.
- Cuando las medusas aparecen en las playas la mejor precaución es permanecer fuera del agua.